viernes, 15 de julio de 2011

ESTIMACIÓN DEL VOTO K 2011 EN BASE A RESULTADOS ANTERIORES

Por
Víctor E. Lapegna
velapegna@yahoo.com.ar

Distrito % % 2007
(2)
nacional (1)

% 2009
(3)
%
2011
(4) % agosto 2011
(5)
1. Pcia. de Buenos Aires 37,3 45.91 32,18 No hubo 38 (14,17)
2. Ciudad Buenos Aires 8,60 23.78 11,61 27,78 22 (1,89)
3. Córdoba 8,71 23.84 16,70 No hubo 15 (1,30)
4. Santa Fe 8,51 35.50 09,63 32,00 30 (2,55)
5. Mendoza 4,29 60.93 27,25 No hubo 30 (1,28)
6. Tucumán 3,55 62.68 52,78 No hubo 60 (2,13)
7. Entre Ríos 3,21 45.52 34,35 No hubo 35 (1,12)
8. Salta 2,85 75.77 34,50 68,05 50 (1,42)
9. Chaco 2,64 49.52 49,93 No hubo 50 (1,32)
10. Corrientes 2,44 54.12 21,30 No hubo 40 (0,97)
11. Misiones 2,32 69.28 16,63 77,00 70 (1,76)
12. Santiago del Estero 2,09 79.48 73,47 No hubo 75 (1,56)
13. San Juan 1,63 58.24 55,00 No hubo 58 (0,94)
14. Jujuy 1,54 61.90 25,00 No hubo 45 (0,38)
15. Río Negro 1,52 56.85 31,41 No hubo 45 (0,68)
16. Neuquén 1,41 37.19 13,04 70.00 55 (0,77)
17. Formosa 1,26 74.13 64,33 No hubo 70 (0,88)
18. Chubut 1,25 66.28 55,80 36,51 38 (0,47)
19. San Luis 1,08 8,40 1,64 No hubo 2 (0,02)
20. Catamarca 0,90 53.24 33,47 47,29 48 (0,42)
21. La Pampa 0,87 48.08 37,74 No hubo 30 (0,26)
22. La Rioja 0,80 48.79 53,57 67,2 60 (0,48)
23. Santa Cruz 0,68 68.46 41,14 No hubo 45 (0,30)
24. Tierra del Fuego 0,34 54.60 34,69 44,5 45 (0,15)
TOTAL 100 44,91 29,10 - 36,84
Fuentes - (1), (2), (3) y (4): Dirección Nacional Electoral – Ministerio del Interior
(5) Elaboración propia.

(1) Porcentaje de los votantes del distrito en el padrón nacional.
(2) Porcentaje de votos obtenidos por Cristina Fernández de Kirchner en la elección 2007
(3) Porcentaje de votos obtenidos por el Frente para la Victoria en la elección 2009
(4) Porcentaje de votos obtenidos por el Frente para la Victoria en elecciones del 2011
(5) Estimación de votos para Cristina F. de Kirchner en la elección del 14 de agosto 2011




ANÁLISIS GENERAL
• Dado que cada partido político presenta una única nómina de candidatos a presidente y vicepresidente, senadores y diputados nacionales; las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias o PASO del próximo 14 de agosto pasaron a ser una primera vuelta casi no vinculante ya que sus resultados sólo afectarán en forma concreta a quienes obtengan menos del 1,5% de los votos y por ello no puedan presentarse en octubre.
• Así como es posible que en esa primera vuelta no vinculante haya un nivel de abstención superior a la media habitual, también lo es que se registre una masiva concurrencia que haría de esos comicios un adelanto muy representativo del resultado que puede darse en las elecciones del 24 de octubre.
• Es previsible que el 14 de agosto sea menor la incidencia del llamado “voto útil” (el que elige los candidatos que aparecen como factibles ganadores, con prescindencia del grado de adhesión que suscite en el votante) y que muchos electores decidan a cuales candidatos nacionales votar en base a sus simpatías y rechazos.
• En otros términos, es posible que el 14 de agosto pese más lo que podría llamarse el voto “premio” y el voto “castigo”, inspirado sin prejuicios en la opinión más que en el interés y eso podría perjudicar al oficialismo dado que, a nuestro juicio, los k obtienen su mayor respaldo electoral de parte de quienes deciden su voto en función de intereses materiales, expresado en lo que se podría denominar “voto consumista”, acotando que esto implica un juicio de realidad y no de un juicio de valor, dado que votar en función del interés es tanto o más válido que hacerlo desde la opinión.
• En tal sentido, las elecciones que autorizan una comparación adecuada con las del 14 de agosto son las que se realizaron este año en la Provincia de Santa Fe que fueron también Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).
• En esos comicios las tres listas del oficialismo provincial totalizaron un 37% de los votos, en tanto que las de la oposición, sumando las cuatro del PJ y la de Del Sel, alcanzaron un 53%.
• Un resultado que desmiente la afirmación que se repite hoy en los análisis periodísticos según la cual en todas las últimas elecciones ganaron los candidatos del oficialismo.
• No fue ese el caso de las elecciones PASO de Santa Fe de mayo y ese resultado, con las diferencias del caso, podría reiterarse en las PASO nacionales del 14 de agosto.
• Por lo demás, el resultado de la “primera vuelta no vinculante” del 14 de agosto, amen de dejar en el camino a quienes no alcancen el 1,5% de los votos, tendrá un innegable efecto en la elección del 24 de octubre.
• El objetivo para el 14 de agosto es, a nuestro juicio, doble: que la fórmula del gobierno no llegue a reunir el 40% de los votos y que la fórmula Duhalde-Das Neves se ubique en segundo lugar, por encima de la que integran Alfonsin-González Fraga.
• El primer punto del doble objetivo (que Fernández de Kirchner y Boudou no alcancen el 40% de los votos) tendría efecto deletéreos sobre el activismo y el voto k, al destruir el triunfalismo con el que se busca instalar por todos los medios en la opinión pública la noción de que su mayoría electoral está asegurada y que la reelección es un hecho.
• El segundo punto (que la fórmula peronista fuera la más votada de la oposición) podría hacer que el 24 de octubre Duhalde-Das Neves ganaran para sí parte de los electores que el 14 de agosto prefirieron otras opciones opositoras, atraídos por el llamado voto útil.
• En una segunda vuelta electoral entre CFK y Duhalde creemos segura nuestra victoria, entre otras razones porque casi todos los votantes de Alfonsín en primera vuelta no dudarían en votar por Duhalde.
• En contraste, si el adversario del oficialismo en segunda vuelta fuera Alfonsín, es probable que una porción significativa de los votantes de Duhalde en la primera vuelta no lo votaran, ya que parece más cerrado el rechazo por Alfonsín de los peronistas opositores al kirchnerismo, que el de los radicales por Duhalde.
• En otro orden conviene recordar que en las elecciones del 2003, los candidatos presidenciales del justicialismo sumaron el 60,8% de los votos, distribuidos entre Carlos Menem (24,45%), Néstor Kirchner (22,24%) y Adolfo Rodríguez Saa (14,11%).
• En las presidenciales del 2007, las candidaturas presidenciales justicialistas netas sumaron un 53,59%, contando el 44,95% de Cristina Fernández de Kirchner y el 7,64% de Alberto Rodriguez Saa, a lo que debe agregarse parte del 16,91% que obtuvo el también justicialista Roberto Lavagna, quien fue candidato de la Unión Cívica Radical; con lo que es válido suponer que se mantuvo el 60% del voto justicialista de los comicios del 2003.
• Si ese 60% de voto justicialista del 2003 y el 2007 se mantuviera en el 2011 y CFK obtuviera aproximadamente entre un 35% y un 38% de los votos, a Duhalde y Rodríguez Saa les quedaría para distribuir entre sí alrededor de un 22% (por ejemplo, 14% para Duhalde y 8% para Rodríguez Saa), aunque Duhalde podría obtener además el 3%, que fue la sumatoria del voto que recibieron Jorge Sobisch y Ricardo López Murphy en el 2007.
• El restante 40% se repartiría entre los otros candidatos, en un orden de prelación que podría ser el siguiente: Ricardo Alfonsín, Elisa Carrió, Hermes Binner, Alcira Argumedo y Jorge Altamira.
• Alfonsín, mediante su acuerdo con De Narváez y González Fraga, podría hacerse de, al menos, un 10% de los votos que en el 2007 tuvo Lavagna y de alrededor del 10% del 23% de los votos que recibió Carrió en 2007 y si así fuere, con el 20% de los votos accedería al segundo lugar y quedaría en buena situación para las elecciones del 24 de octubre.
• Considerando que Argumedo podría llegar apenas al 3% (sumando el 1,58% de Fernando Solanas y el 0,75 de Vilma Ripol en 2007, con el agregado de algunas décimos que le aportara el PTP/PCR) y que Altamira no parece que supere el 0,61% que logró Néstor Pitrola en 2007; quedaría alrededor de un 13% que se distribuiría entre Carrió y Binner.
• Listamos a continuación los distritos en los que puede predecirse un triunfo k con un piso del 40% de los votos y colocamos entre paréntesis lo que representaría cada uno de esos triunfos en el padrón nacional, que totaliza un 13,78% del padrón nacional.
o Tucumán (2,13%)
o Salta (1,42%)
o Chaco (1,32%)
o Corrientes (0,97)
o Misiones (1,76%)
o Santiago del Estero (1,56%)
o San Juan (0,94)
o Jujuy (0,38)
o Río Negro (0,68%)
o Neuquén (0,77%)
o Formosa (0,88%)
o Catamarca (0,42%)
o La Rioja (0,48%)
o Santa Cruz (0,30%)
o Tierra del Fuego (015%)
• Ese total podría reducirse si el resultado del 14 de agosto fuese inferior a lo que marcan nuestras predicciones. Por ejemplo, en Salta, donde calculamos que CFK podría obtener un 50%, con una baja del 18% respecto del caudal que obtuvieron en la elección provincial de este año Juan Manuel Urtubey y Walter Wayar. No es imposible que esa baja sea aún mayor dada la creciente rispidez de las relaciones entre el gobierno y el peronismo salteño con el gobierno nacional.
• En tanto, en los siguientes distritos es previsible una victoria de la oposición e indicamos entre paréntesis el peso en el padrón nacional del porcentaje que estimamos que puede obtener en ellos el oficialismo, sumando un total de votos equivalentes al 7,51% del padrón nacional
o Ciudad de Buenos Aires (1,89%)
o Santa Fe (2,55%)
o Córdoba (1,30%)
o Mendoza (1,28%)
o Chubut (0,47%)
o San Luis (0,02%)
• Quedan, por fin, distritos de resultado incierto, entre ellos la Provincia de Buenos Aires que, con un 37,3% del padrón nacional, es el núcleo principal de la definición electoral y ameritaría una consideración especial. Presentamos aquí nuestra estimación sobre el voto k en cada uno de ellos en cuanto a su peso en el padrón nacional, en los que totaliza un 15,55% del voto general.
o Entre Ríos (1,12%)
o La Pampa (0,26%)
o Buenos Aires (14,17%)
• En el análisis conviene tener en cuenta la independencia de los votantes respecto de los dirigentes y/o candidatos ya que implica que la posición que tome un candidato o dirigente en cuanto apoyar a otro candidato en una elección posterior no compromete a quienes lo hayan votado. Por ejemplo, es probable que una gran parte de quienes votaron por Omar Perotti en las internas de Santa Fe no lo acompañen con el sufragio en la elección general, dado que se alineó con Rossi y el kirchnerismo. De ahí que la postura de Fernando Solanas y Proyecto Sur en cuanto a “dejar en libertad de acción” a sus votantes en la segunda vuelta, en gran medida consiste en aceptar lo que ya era una decisión tomada por sus electores, quienes votarán por Macri, por Filmus o en blanco, con prescindencia de lo que hagan y digan Solanas y los dirigentes de Proyecto Sur.